Limpiar bien los ajíes removiéndole las semillas. Hervirlos durante 8 minutos en agua con el azúcar.
Colocar en la licuadora o procesador junto con el maní, el queso, la leche, sal y pimienta. Poner en marcha la licuadora o procesadora y agregar gradualmente el aceite hasta obtener la consistencia deseada. Rectificar la sazón.