Si vamos a utilizan setas shiitake secas, las remojamos en agua caliente con el azúcar durante media, hora.
Mientras, preparamos el caldo: pelamos el jengibre y lo cortamos en rodajas; cortamos dos cebollinos a lo largo por la mitad; cortamos por la mitad los dientes de ajo. Acto seguido, ponemos el caldo de pollo en una cazuela con el jengibre, el ajo y los cebollinos, dejándolo cocer durante media hora a fuego medio, cuidando de mantener la cazuela entreabierta.
Escurrimos las setas, les quitamos los pies y los tiramos; cortamos los sombreros en tiras de medio centímetro. Salteamos las setas en una sartén con un poco de aceite en torno a tres minutos y las rociamos con media cucharada de salsa de soja. Cocemos los fideos en agua hirviendo abundante durante unos diez minutos, hasta que estén hechos. Los lavamos con agua fría y los escurrimos.
Remojamos el alga wakame diez minutos en agua; luego la blanqueamos un minuto en agua hirviendo y la escurrimos.
Colamos el caldo en otro recipiente y tiramos el jengibre, los cebollinos y el ajo. Agregamos al caldo el resto de la salsa de soja, el sake, la sal y un pellizco de pimienta. Dejamos que hierva y añadimos los fideos. Cocemos durante un minuto a fuego medio.
Repartimos los fideos en cuatro cuencos individuales, dejando que el caldo mantenga un punto de hervor.
Incorporamos los langostinos cocidos, las algas wakame y las setas shiitake a las cuatro raciones de fideos. Derramamos el caldo caliente sobre los cuencos.
Cortamos en tiras finas de juliana los cebollinos restantes y las espolvoreamos sobre los fideos. Lo servimos caliente.